souvenir de fources

En el sur de francia a los plátanos les crecen las ramas con forma de garra hacia el cielo. La chica del pañuelo en la cabeza se enamoró de uno que había a la puerta de nuestra casa. Cada tarde se abrazaba a él con los ojos cerrados. Dijo, en francés, que tenía el tacto de la piel de un hombre dormido.